La Dirección General de
Medio Natural y Gestión Forestal del Gobierno de Aragón ha liberado 22
ejemplares de visón europeo -'Mustela lutreola'- en varios afluentes de la cuenca del Río Aragón, durante la primavera y el inicio del verano de 2021, con el objetivo de asentar esta especie en la comunidad autónoma.
Con
esta acción se pretende crear un nuevo núcleo poblacional lejos de las
principales amenazas para estos animales. La más relevante es la
presencia de visón americano, una especie exótica invasora que afecta a
un gran número de especies autóctonas. Cuando aparece, excluye al visón autóctono y constituye la principal amenaza para la supervivencia de esta especie amenazada,
más pequeña y en situación crítica precisamente por la expansión de su
pariente foráneo, ha informado el Ejecutivo autonómico en una nota de
prensa.
La especie invasora
se encuentra ausente en la cuenca del río Aragón, lo que favorecerá la
supervivencia y conservación en el futuro de los ejemplares de visón
europeo liberados, aumentando así su área de distribución, y,
previsiblemente, el número de individuos en el medio natural. De este
modo se podría avanzar en conseguir que la especie se aleje poco a poco de la sombra de la extinción que le amenaza.
Esta
acción, denominada 'colonización asistida', trata de crear una nueva
población fuera del rango de distribución original de la especie, en un
entorno libre de sus principales amenazas y se recurre a ella cuando la
situación de la especie es "muy crítica".
En
este proyecto, los técnicos y Agentes de Protección de la Naturaleza
del Gobierno de Aragón han contado con la colaboración del Ministerio
para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico a través de la
empresa pública Tragsatec, así como con la de los diferentes Centros de Recuperación que desarrollan el Programa de conservación 'ex situ' de la especie.
Aragón
ya posee núcleos de población "natural" de visón europeo distribuidos
en ocho cuadrículas, que se ubican en la franja noroccidental de la
provincia de Zaragoza.
El ensayo de colonización asistida se ha realizado en la cuenca del río Aragón, aguas arriba de la presa de Yesa,
con diferentes afluentes que presentan un hábitat adecuado para la
especie, pero están geográficamente separados de las zonas de presencia
habitual de la especie.
Por
otra parte, los animales empleados en la liberación proceden de la cría
en cautividad con ejemplares procedentes de dos poblaciones distintas,
la que ocupa España y la presente en Europa oriental. Este origen
"mestizo" hace que la suelta de ejemplares haya constituido también un ensayo sobre la capacidad de adaptación de estos ejemplares al hábitat disponible en la cuenca del Ebro.
La
cría experimental entre ejemplares españoles y del resto de Europa se
llevó a cabo entre 2018 y 2020 simultáneamente en centros de cría
españoles y de Estonia, concretamente en el Zoo de Tallin.
De
este modo, la liberación en Aragón ha sido un paso "importante" para la
evaluación de la viabilidad de una futura unidad en la gestión de todas
las poblaciones de la especie a nivel europeo, algo que se presenta
como "muy urgente" debido a la "crítica "situación de la especie a nivel global.
Todos los ejemplares liberados han pasado su periodo de aprendizaje en España, en
los jaulones presuelta dispuestos tanto en el Centro de Recuperación de
Fauna Silvestre de La Alfranca, en Aragón, y en La Fombera (La Rioja);
así como en las instalaciones de los centros de cría de El Pont de
Suert, en Lérida, y de la Fundación para la Investigación en Etología y
Biodiversidad (FIEB), en Toledo.
De
forma previa, se les han colocado unos equipos de radioseguimiento, lo
que ha permitido monitorizar de forma constante el proceso de adaptación
al medio natural y comprobar la viabilidad del proyecto durante los dos
primeros meses. Tras este periodo de seguimiento, los ejemplares han sido recapturados para retirarles los emisores y asegurar con ello que no les causan problemas en el futuro.
Como
resultado de estos dos meses de seguimiento, al menos nueve ejemplares
han sobrevivido durante este periodo -41 por ciento- aunque uno de ellos
fue depredado poco después y antes de ser recapturado. De estos ocho ejemplares que permanecen en el área de suelta, cuatro son hembras y cuatro machos.
Por
contra, se han localizado siete ejemplares muertos --32 por ciento--
durante estos dos primeros meses. Las causas de mortalidad detectadas
han sido la depredación por otros carnívoros en cinco casos y el
atropello en dos ocasiones; ninguna de ellas relacionada directamente con el proceso de suelta o cría en cautividad.
De
hecho, todos los animales hallados -vivos o muertos- después de los dos
meses, estaban en buenas condiciones corporales, con un peso similar al
de ejemplares nativos en otros territorios. Este dato demuestra, que han sido capaces de encontrar comida sin mayor dificultad.
Además de esto, tres ejemplares perdieron los collares de radioseguimiento -dos de ellos se localizaron posteriormente pese a no llevar collar-
y tres más, no han podido ser localizados. Por lo tanto, hay cuatro
ejemplares perdidos y de los que no se dispone de información sobre su
estado.
En general, los resultados son similares a otras liberaciones llevadas a cabo previamente en otros países
(Estonia y Alemania) o en otros territorios de España: Guipúzcoa, La
Rioja y Álava, lo que permite a la Dirección de Medio Natural albergar
cierta esperanza en el asentamiento de los ejemplares.
Este mismo proyecto se intentó llevar a cabo en el año 2017, con resultados mucho menos esperanzadores. En
aquel ensayo: siete visones de los sólo ocho liberados murieron en los
15 primeros días, por causas muy similares a las ahora constatadas.
Varios
son los factores que parece han podido influir en los mejores
resultados de la experiencia de 2021, aunque es pronto para poder sacar
conclusiones definitivas. En cualquier caso, se baraja que podría haber influido la mejora en el aprendizaje
de los ejemplares previo a la liberación, la selección de los lugares
de liberación, el periodo del año en que se llevó a cabo la suelta, la
edad de los individuos seleccionados -adultos en 2021 y juveniles en
2017- y también el temperamento individual de los ejemplares.
En
todo caso, los resultados obtenidos en ambas acciones, se consideran
experiencias "muy valiosas" que seguro seguirán ayudando a adoptar las
mejores decisiones en el intento de salvar a esta especie.
El mamífero más amenazado de Europa
El
visón europeo es un pequeño mustélido y considerado el mamífero más
amenazado de Europa, ya que ha visto reducida su área de distribución a
menos del 5 por ciento de su área original. En España su presencia
constatada cuenta con una estima de menos de 500 individuos, aunque probablemente sea inferior.
En
Europa persisten pequeñas poblaciones también en Francia y en el Delta
del Danubio (Rumanía y Ucrania) y posiblemente en Rusia, lo que permite
calificar su estado como crítico, tal y como reconoció en 2011 la Unión
Internacional de Conservación de la Naturaleza (UICN), clasificándolo en la Lista Roja de especies amenazadas bajo la máxima categoría de amenaza "en peligro crítico de extinción".
Como consecuencia, la legislación de la Unión Europea -Directiva Hábitats- la califica como una especie de interés comunitario prioritaria, obligando
a sus estados miembros a su protección estricta. En España se encuentra
catalogada como especie en Peligro de Extinción, y su situación
extremadamente comprometida hizo que, en acuerdo de la Conferencia
Sectorial de Medio Ambiente fuese declarada en "situación crítica" en
2018, lo que supone el reconocimiento de un riesgo inminente de
extinción.