"Venimos a ver el milagro de Lecina", cuenta Silvia, de Sabiñánigo, que este sábado visitó junto a su familia la milenaria carrasca, Árbol de España 2020 y que opta a convertirse en el Árbol Europeo. Como ella, cientos de turistas llegados de varios puntos de la geografía provincial (Barbastro, Monzón, Binéfar, Huesca…). "Esto parece Salou", bromeaba un visitante ante la afluencia de turistas que sobre todo se concentraron en torno al mediodía. "No se veía tanta gente ni en la fiesta mayor", comentaba un vecino. "Y ya verás cuando abran el confinamiento provincial y vengan de Zaragoza", decía otro.
A solo una semana de terminar el plazo de votación para elegir el Árbol Europeo de 2021 (https://www.treeoftheyear.org/vote), los altoaragoneses han querido escenificar su apoyo a la candidatura de Lecina, una pequeña población del Sobrarbe, frontera con el Somontano, de algo más de una decena de habitantes. Y lo han hecho en masa. El Parque Cultural del Río Vero, al que pertenece Lecina, puso el sábado una guía turística para informar a los visitantes de las cualidades de este árbol declarado de interés cultural desde 2015 y fomentar un turismo sostenible, es decir respetuoso con esta encina, todo un icono en las comarcas del Sobrarbe y del Somontano.
Además, un agente de Protección de la Naturaleza estuvo velando por el respeto al entorno, un mensaje que se recalca desde el Ayuntamiento de Bárcabo, al que pertenece Lecina. El Ayuntamiento va a solicitar al Parque Cultural del Río Vero y al Gobierno de Aragón ayudas para acondicionar el principal atractivo turístico de esta localidad -pero no el único, ya que aquí también se encuentran pinturas de arte rupestre- y evitar masificaciones.
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